Consejos para mejorar tu imagen corporativa

La imagen corporativa en Internet es un aspecto fundamental para el futuro de nuestro negocio. De ella depende, en parte, la percepción que los clientes tienen de nuestra marca, su grado de compromiso con nuestra empresa, nuestra facilidad o dificultad para fidelizar a nuestros clientes y, en suma, una parte significativa de nuestra rentabilidad.

Cuando una marca consolida una buena imagen corporativa, eso tiene efectos y repercusiones a largo plazo. Creamos un concepto, unos valores asociados a la marca y un saber hacer que tiene una influencia significativa en las ventas.

Por qué es importante tu imagen corporativa

Si quieres mejorar tu nivel de facturación, conseguir clientes más caros o de mayor prestigio y, en definitiva, obtener una mayor rentabilidad, no puedes competir sólo por precio. Debes trabajar a fondo tu imagen corporativa.

Muchas tiendas online no son conscientes de esto, por eso se lanzan a vender productos a precios low cost, lo que provoca que el cliente vaya asociando cada vez más su marca con productos de baja calidad. También cabe la posibilidad de que llegue un momento en el que los costes fijos y variables de tu negocio no son asumibles porque obtienes muy bajos ingresos en comparación.

Obtener bajos ingresos te lleva a tener menos dinero en tesorería, lo que también reduce tu margen de maniobra para poder invertir de cara al futuro y hacer crecer tu negocio. Por esta razón, cuidar tu imagen corporativa y asociarla con valores positivos es de gran importancia para conseguir que tus clientes queden satisfechos y estén dispuestos a pagar un precio justo (incluso caro) por productos con una relación calidad precio decente.

¿Qué es la imagen corporativa?

La imagen corporativa no es simplemente el logotipo de tu tienda, ni el nombre de tu empresa. Es un concepto, es una idea que se refleja en muy diversos aspectos de tu negocio.

• En la manera en la que respondes al teléfono


• En el modo en el que visten tus empleados


• En los colores corporativos de tu tienda online y offline


• En la forma y rapidez con la que respondes los correos electrónicos

Y un largo etcétera de elementos que tienen una influencia importante a la hora de hacer crecer tu negocio, tanto en Internet como en la tienda física.

Para cuidar tu imagen corporativa, has de ponerte en la piel del cliente y comprobar qué es lo que éste siente cuando entra en contacto con tu marca.

• Si recibe un buen trato y tiene confianza con tu empresa


• Si ve satisfechas sus dudas y preguntas a una velocidad aceptable


• Si deja buenos comentarios en tu tienda online diciendo que le gustan tus productos


• Si habla bien de tu marca en las redes sociales o en foros especializados

Como podrás darte cuenta, estos aspectos dependen de una suma de factores que debes tener en cuenta y trabajar a fondo, desde la atención al cliente, como el diseño de tu web, la gestión de pedidos o tu actividad en redes sociales.

Cómo saber si tienes una buena imagen corporativa

Para conocer si tienes una buena imagen corporativa, si tu negocio lleva años asentado en Internet, puede ser habitual encontrar sitios web en los que se habla de tu empresa, o pueden encontrarse personas recomendando tus productos en Twitter, Instagram u otras redes sociales.

Si esto no ocurre, como puede ser lo lógico en empresas que no realizan una actividad de marketing continuada, puede deberse a que la imagen de tu empresa aún no es muy conocida. Pocas personas te citan o hablan de ti en otras páginas web o blogs, no recibes suficiente feedback de tus clientes y tu marca aún no está asociada con ninguna idea.

En este caso, se puede decir que tu marca todavía está virgen y te queda mucho trabajo por hacer para que tus clientes hablen de ti. Siempre habrá clientes que hagan alguna crítica negativa, pero éstas deben tomarse no como un motivo para venirse abajo, sino para corregir cosas que se deben corregir si queremos que nuestra marca esté asociada con valores positivos.

¿Cómo reconvertir la imagen corporativa de tu marca?

Hay empresas cuyo nombre ha acabado asociado a ideas que no obedecen al objetivo actual de la empresa. Por ejemplo, en el caso de que estuvieras vendiendo demasiado barato, o productos de proveedores de mala calidad. Si quieres quitarte ese “sambenito”, tendrás que llevar a cabo un proceso de rebranding para comunicar mejor el valor de tu marca y mejorar tu reputación.

En este sentido, un software de gestión para empresas te puede mostrar también cuándo el margen de beneficio es tan bajo que no te permite conseguir resultados positivos. Tu empresa debe pensar en el futuro, pensando en ahorrar a largo plazo y crecer de manera constante, no sólo para pagar los sueldos y los gastos de la empresa.

¿Estás potenciando la imagen de marca de tu negocio?, ¿qué acciones consideras imprescindibles para mejorar tu imagen de marca?


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