5 áreas de costes en las que puedes ahorrar con tu negocio

Puede que hayas llegado a la conclusión de que necesitas reducir costes en tu empresa. Pero, ¿de dónde es necesario recortar? ¿y cómo hacerlo de manera eficaz para no descapitalizar tu negocio y entrar en una espiral que te conduzca finalmente al cierre de la empresa?

Debemos entender que muchos de los aspectos que consideramos costes son en realidad inversiones, que pueden tener un beneficio directo en nuestro negocio. Ahora bien, si no mides la forma en que tus inversiones repercuten en la rentabilidad de tu empresa, tratar de reducir los costes es como caminar a ciegas.

Para que tengas una idea más clara de las diferentes áreas de costes en las que podrías optimizar para que tu negocio sea más flexible, hemos preparado este post en el que te daremos algunas claves que no puedes dejar de lado.

Áreas de costes que puedes optimizar con la ayuda de un ERP

Veamos las áreas de costes en las que muchas veces se pierde la rentabilidad de tu empresa, pero sin que seas consciente de ello.

Un exceso de costes supone muchas veces un riesgo mal medido, que en el largo plazo puede resultar perjudicial para tu negocio, si no aplicas medidas de optimización.

1. Acumulación de stock

¿Tienes un exceso de costes en stock? Esto puede deberse a que has comprado muchas más mercancías de las que demandan tus clientes, lo que te está generando un coste extra.

Por una parte, en el mantenimiento de esas mercancías en tus almacenes, y por otra, el coste de oportunidad que supone tener los almacenes llenos con productos que no se venden a una velocidad adecuada.

Un sistema de gestión ERP puede ayudarte a analizar qué productos te generan más margen y qué productos tienen una venta más fácil, de manera que puedas equilibrar tu almacén y evitar el exceso de stock.

2. Gestión de las deudas a corto plazo

¿Haces una mala gestión de las deudas? Esto muchas veces se deriva de un mal control de la tesorería. Tienes que hacer frente al pago de intereses de préstamos debido a que no has hecho una gestión adecuada del flujo de ingresos que obtenías en tu empresa. También puede deberse a una reducción de la demanda y una pérdida de ventas o a cualquier cambio en el mercado.

Como consecuencia, estás asumiendo más deudas de las que puedes afrontar, generando mayores gastos en intereses de cara al futuro. En estos casos, debes ponerte muy serio con las cuentas de tu negocio, y analizar qué es lo que no está funcionando a nivel financiero.

3. Gestión fiscal

Una mala gestión fiscal puede dar lugar también a mayores gastos en impuestos, así como también a multas y sanciones, o al hecho de no poder acceder a subvenciones que exijan a las empresas estar al corriente con la administración pública.

Un sistema ERP puede ser la clave para mejorar la gestión de tesorería y tener el control de la contabilidad, así como optimizar los procesos ligados a la gestión tributaria en tu empresa. Cumple con la legislación fiscal, paga tus impuestos y consigue pagar menos al fisco al realizar una mejor previsión y mayor control de las fechas y las declaraciones que debes realizar.

4. Devoluciones

¿Cuántas devoluciones se producen en tu empresa debido a fallos logísticos en los tiempos de entrega, entrega de productos equivocados o mercancía estropeada durante el trayecto? Mejorar la gestión de los pedidos y las ventas puede ayudarte a reducir las devoluciones.

Pero aplicar una mejor política de gestión de devoluciones puede ayudarte a reducir los costes derivados de éstas, ya que muchas veces una mala previsión puede dar lugar a mayores gastos imprevistos.

5. Gestión de los proveedores

Quizás tu empresa debería plantearse si está ofreciendo un valor añadido real a los clientes o podría ser útil cambiar de proveedores. No siempre acceder a proveedores más económicos va a mejorar el servicio, pero en ocasiones puede ocurrir que estemos trabajando con proveedores que no nos están proporcionando un adecuado retorno de la inversión, o en los que los márgenes de beneficio se han ido reduciendo a lo largo del tiempo.

Los costes de producción y compras avanzan, muchas veces impulsados por la inflación, pero esto no siempre va acompañado de una mejora del servicio. Como consecuencia, las empresas se pueden ver afectadas si ven cómo sus costes aumentan, pero sus ingresos permanecen constantes.

Una buena medida sería aplicar un análisis de la situación de cada proveedor, sus precios y el nivel de servicio que te están ofreciendo. Piensa en tus clientes, pero también en la relación coste-beneficio que te proporciona cada proveedor, y busca alternativas que te ayuden a ofrecer mejores soluciones a tus compradores.

La ayuda de un ERP puede ser determinante en el análisis de las distintas áreas de costes. Nuestra recomendación es que utilices el software de gestión myGESTIÓN para hacer un análisis completo de tus ingresos y gastos, y veas en qué áreas es conveniente optimizar para que aumente la rentabilidad de tu empresa. Date de alta gratis durante 15 días y descubre sus ventajas para tu negocio.


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