¿Cómo diseñar tu modelo de negocio?
Antes de lanzar una empresa, es vital poder definir los pilares en los que se va a sostener. Si quieres tener beneficios y crear un proyecto a largo plazo, la planificación empresarial puede ser decisiva, aunque no suficiente para lograr que tu empresa tenga éxito. Se trata por tanto de llevar a cabo el diseño del modelo de negocio, un aspecto que va más allá de tu estrategia de comunicación o de dónde tengas ubicada tu empresa, si bien es importante tener un software de gestión empresarial que te ayude a tener una panorámica de tu negocio..
¿Cómo diseñar un modelo de negocio y qué debes tener en cuenta? ¿Por qué es importante el Business Model a la hora de llevar a buen término una idea empresarial? En este post trataremos de solucionar tus dudas sobre cómo diseñar el funcionamiento futuro de tu negocio.
Qué es un modelo de negocio
El modelo de negocio puede definirse como una representación abstracta de tu empresa y el valor que aporta al mercado. Todas las empresas tienen un objetivo y una misión, para lo cual es necesario disponer de un proyecto financiero que lo haga posible, así como un público objetivo al que se dirige y una propuesta de solución a un problema o necesidad que existe en ese segmento del mercado.
Un modelo de negocio puede expresarse de forma gráfica, a través de un modelo Canvas, con el que podemos estructurar los distintos elementos estratégicos de la empresa. Esta herramienta muestra una estructura de 9 bloques o cuadrantes, que se pueden adaptar a lo largo del tiempo y tienen como objetivo presentar el modelo de negocio de forma creativa, modificable y comprensible.
Los 9 elementos clave del modelo Canvas
Veamos cuáles son los elementos principales de un modelo de negocio siguiendo la metodología Canvas:
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- Propuesta de valor: es aquel elemento diferencial que aportes a tu público objetivo y por el que tus clientes están dispuestos a pagar. No es solamente qué vendes, sino las características particulares de tu oferta que la diferencian de tu competencia.
- Socios clave: esto incluye tanto a los socios inversores de la empresa, como partners y aliados estratégicos. Es un factor de tu modelo de negocio, porque si tienes un gran proveedor y luego éste cierra, puede afectar a toda tu actividad.
- Estructura de costes: ¿cómo es la distribución de los costes de tu empresa? Debería estar enfocada en aquellos activos que te generarán ingresos. Se trata de un factor muy importante para el buen funcionamiento de tu tesorería.
- Relaciones con los clientes: es lo que define el valor de tu marca. ¿Cuál es la percepción que tienen los clientes de ti cuando contactan con tu empresa? Contar con soluciones CRM ayuda a la gestión de las relaciones con los clientes.
- Actividades clave: ¿cuáles son las actividades que realiza tu empresa? Debes definir qué soluciones o problemas resuelves, y si lo haces con productos y/o servicios.
- Recursos clave: ¿cuáles son los medios que utilizas para satisfacer a tus clientes? Aquí debes incluir tanto los recursos materiales (hardware, herramientas de software ) como los recursos humanos, internos o externos.
- Fuentes de ingresos: ¿de dónde vienen los ingresos? Hay muchas fuentes de financiación: inversores, subvenciones, ingresos por ventas Lo ideal es que tu empresa llegue a un punto en el que sólo dependa de sus ingresos por ventas.
- Segmentos de clientes: las empresas se enfocan en segmentos de clientes, o partes específicas de un mercado, que reúnen determinadas características. Hay negocios generalistas y otros más de nicho. Debes tener claro a quién te diriges, ya que ésta es la llave del éxito de tu empresa.
- Canales: son los puntos de contacto y comunicación entre la empresa y el cliente. Esto incluye tu página web, teléfono, tiendas físicas, app móvil, redes sociales, publicidad...
¿Por qué es importante definir tu modelo de negocio?
El éxito o fracaso de tu negocio depende de que hayas acertado en la configuración de los distintos pilares de tu modelo de empresa. Un negocio son sus clientes; en la medida en que la empresa consiga satisfacer una necesidad y aportar una solución a un grupo de personas, consiguiendo que los ingresos obtenidos sean superiores a los medios utilizados para conseguirlos, podrá tener éxito y mantenerse en el tiempo.
Una de las herramientas esenciales para hacer un seguimiento de los resultados de un negocio son los cuadros de mando. En estos podemos visualizar la evolución de las ventas a lo largo del tiempo y la relación entre ingresos y gastos. Los gastos pueden ser superiores a los ingresos en un momento dado, pero esa situación no puede mantenerse en el tiempo si queremos que la empresa tenga éxito.
Si los resultados no son los esperados, quizás haya que cambiar las técnicas utilizadas. Esto implica hacer cambios en nuestra metodología Canvas, por ejemplo añadiendo nuevas fuentes de financiación o nuevos canales de comunicación. Un elemento esencial que hay que tener muy claro es cuál es nuestra actividad clave.
Por ejemplo, una tienda online puede estar enfocada en la venta de muebles modernos, por lo que hay que entender que todos los gastos deben estar supeditados a este primer y principal objetivo, que representa el 'core' de tu negocio. Si además de muebles, vendes otros productos accesorios como adornos y cuadros, puede que obtengas una pequeña rentabilidad por esta línea de productos, pero no representan la parte principal de tu modelo de negocio. No eres reconocido como tienda de adornos, sino como una tienda de muebles.
Para tomar decisiones en cuanto a nuestro modelo de negocio, es imprescindible contar con un software ERP que nos permita hacer el seguimiento de las ventas, entender de dónde proceden los ingresos, en qué estamos invirtiendo más y cuáles son los productos que más se venden. myGESTIÓN es la herramienta definitiva para que puedas gestionar y entender tu negocio, así como hacer un seguimiento de su evolución a lo largo del tiempo, de acuerdo con los recursos invertidos.
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