Cómo gestionar tu negocio en verano

Si eres autónomo o tienes una pequeña empresa, gestionar tu negocio en verano puede volverse más complejo. Tienes algunos empleados de vacaciones, probablemente las ventas disminuyan porque tus clientes también se han ido de vacaciones y, en definitiva, tienes que prepararte para afrontar el factor estacional en los resultados de tu empresa. En definitiva, ¿cómo gestionar tu negocio en verano?

En este artículo te mostramos algunas estrategias y técnicas para dirigir, gestionar y administrar mejor tu empresa durante el verano.

Claves para gestionar tu negocio durante el verano

Para gestionar un negocio en verano, ya sea pequeño o grande, hace falta planificación. Debes tener en cuenta toda una serie de factores para que puedas afrontar esta época del año del mejor modo posible.

Lo ideal es empezar a planificar no cuando estás ya metido en pleno verano, sino varios meses antes, a primeros de cada año o finales del año pasado, de cara a que puedas disponer ya de una estrategia para implementar durante este período de tiempo.

Vamos a ver cuáles son los principales elementos que hay que controlar:

1. Gestión de vacaciones en Recursos Humanos

Los trabajadores de tu empresa tienen derecho a tomarse unos días de vacaciones durante el año, de acuerdo con el convenio colectivo y el Estatuto de los Trabajadores. En muchos casos, los empleados se tomarán las vacaciones durante el verano, a menos que en tu empresa tengáis un mayor volumen de trabajo durante esta época.

En todo caso, deberás llevar un control exhaustivo de las vacaciones de verano de los empleados. De forma que puedas prever con antelación quién va a realizar las tareas que deje de hacer el empleado que está de vacaciones. Algunas empresas, por ejemplo, aprovechan para contratar empleados temporales durante los meses de julio y agosto, o cogen también a becarios para realizar tareas sencillas.

2. Planificación de las ventas

Si las ventas de tu negocio se reducen en verano, necesitas también un 'plan de choque'. Es decir, tienes que hacer algo para poder facturar más, teniendo en cuenta que a lo mejor muchos de tus clientes están de vacaciones. Pensemos por ejemplo en las famosas ''rebajas de verano'' que vemos ahora mismo en muchas tiendas de ropa.

Es un claro incentivo para que las personas aprovechen estos momentos para comprar con descuentos. Ésta puede ser una opción de cara a tratar de vender más, lo cual no quiere decir que tengas más rentabilidad por cada producto vendido, pero sí podrás lograr que aumente tu demanda al haber reducido precios.

3. Control de gastos en verano

El verano suele ser una época de mayor tranquilidad en las oficinas, por lo que puede ser un buen momento para sentarse a analizar los gastos de tu empresa de cara a la nueva temporada en septiembre. Piensa por ejemplo que durante estos días se consume más electricidad, por ejemplo en el aire acondicionado, pero por otro lado se puede reducir en otras áreas al haber menos empleados en la oficina.

Pensemos también en los costes que invertimos en nuestra tienda online. ¿Vale la pena lanzar una campaña de publicidad en verano, cuando el grueso de tus clientes son empresas y éstas ahora están cerradas por vacaciones o las personas que tienen que tomar las decisiones no se encuentran en la oficina?

Puedes estudiar también qué inversiones te conviene hacer durante esta época, ya que a lo mejor alguno de tus proveedores también está haciendo rebajas de verano y podría ser un buen momento para comprar o invertir en material o maquinaria para tu oficina.

4. Compara tus datos con otros veranos

¿Cuánto aumentan o se reducen tus ingresos durante los meses de julio, agosto y septiembre? En ocasiones, es posible incluso que te convenga poner el cartel de ''cerrado por vacaciones'' durante algunas semanas, ya que no siempre te va a salir rentable mantener tu negocio abierto en verano.

No temas comparar tus datos a través de tu ERP online con veranos anteriores. ¿Cuánto y cómo se vendió el año pasado?, ¿qué técnicas se utilizaron entonces para vender más?, ¿qué decisiones se tomaron de cara a optimizar los procesos internos de trabajo durante esta época del año?

5. Planifica los otros trimestres

A lo mejor no puedes hacer nada sustancial para que tu facturación en verano sea equivalente a la del resto del año. Es imposible pretender que las ventas sean iguales para tu negocio, quizás, en verano y en Navidad. Por tanto, en lo que deberías pensar no es tanto en invertir más recursos en verano para tratar de conseguir más ventas, sino reducir al máximo los gastos y concentrar tus esfuerzos en vender más en las épocas del año en las que más se vende.

Por ejemplo, el verano puede ser una buena época para preparar las campañas publicitarias que lanzarás en septiembre o los planes que tengas enfocados para estos días.

¿Estás haciendo frente a los desafíos de gestionar tu negocio en verano?, ¿qué aspectos de los que hemos comentado estás teniendo en cuenta?


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